Soledad

“Cuando estas con alguien tan solo para no sentirte solo, terminas odiando a esa persona.”

Empecé a salir con Camilo por aburrimiento, luego porque insistía y finalmente porque me sentía sola, su compañía era agradable la mayor parte del día, pero pronto empezó a quedarse casi todo el día en mi casa y empecé a aburrirme de él, no podía trabajar, tampoco podía estudiar y sentía que me asfixiaba cada día.

Cada día aparecía después de sus clases de la universidad, se quedaba al almuerzo, y luego dormía un momento, seguido salíamos a dar una vuelta y me traía a casa, cenábamos y se retiraba. Al día siguiente era casi la misma rutina, los sábados me iba a su casa.

Con el paso de los días empecé a aburrirme rápidamente, cada día que pasaba a mi lado, era aún más aburrido, la gente empezaba a murmurar, a criticar, estaban en su razón, entonces me di cuenta que la soledad es mejor opción que pasar el tiempo con alguien a quien no quiero.

Camilo me quería, me quería en sobremanera, pero yo no sentía lo mismo que él, y eso era lo más cruel de todo.

Cada día que pasaba lo veía esmerarse por ser mejor, por agradarme, por hacer que me interese en el… pero nada era suficiente, sencillamente él no era lo que yo necesitaba, así que no podía compensar el vacío que sentía por más que lo desease.

Llegue a cansarme de él, un día me atrape a mí misma planeando una forma de terminar con él, de decirle que ya no quería volver a verlo más, pero no me atrevía, a partir de entonces planeaba cada que podía la forma de decirle adiós, se me ocurrieron muchas ideas.

Al final la ganadora fue esta:

Debemos terminar, déjame hablar por favor, (suspiro) cuando me dijiste para ser enamorados te deje en claro que lo que siento por ti es muy poco casi nada, y te dije la posibilidad de que eso no cambiara para bien, la verdad es que cada día que pasa tu presencia se me hace más incómoda y empiezo a detestar tu compañía, es más, la idea tener que verte diariamente, me dan ganas de desaparecer… Lo siento, de verdad, no sé qué decirte para no hacerte sentir muy mal pero no se me ocurre otra cosa más que esto, no te quiero y posiblemente con el paso del tiempo te quiera menos, tu presencia se volverá molesta y la verdad creo que mereces alguien mejor que yo, por favor mírame, ¿qué puedes esperar de mí? Es todo, hagamos esto más fácil, solo vete y no aparezcas más en mi vida, por cierto aquí está todo lo que me regalaste, puedes llevártelo, y también quisiera que me devuelvas lo que te regale. Ya puedes irte.

Después de haberle dicho todo esto, se fue, me devolvió alguna de las cosas que le di y no volví a saber más de él.

Dama Oscura