Carta
XXVII
No
lo hare, sabes que no dejare lo que tengo ahora para ir a un lugar donde no sé
si me ira bien, ni siquiera sé si tendré un trabajo y tampoco me aseguras que vivirás
conmigo.
Yo
quiero dormir todas las noches contigo, quiero regresar a casa y que tú me estés
esperando, quiero que las cosas vuelvan a ser como siempre fueron, que viajemos
juntos y vayamos de paseo, quiero estar a tu lado cuando duermas y quiero que
sigamos juntos.
Carta
XXVIII
Y
yo quiero estudiar, quiero un hombre que pueda cuidar de mí, que no corra de
los problemas, quiero alguien que pueda dedicarme tiempo, que no me arranque
los sueños y metas, que me acompañe en mis locuras, que el dinero no lo sea
todo para él, que no piense en morir joven por el simple hecho de tenerle miedo
a ser viejo y quiero alguien que no odie a todo el mundo, alguien a quien las
personas que me rodean le sean de su agrado, sé que no todos son como lo
esperabas, pero para mí no existen perjuicios cuando se trata de personas, así
sean personas acomodadas o escasas de dinero para mí son iguales y es algo que
no puedo ver en ti, el simple hecho de que alguien esté por debajo de tu nivel
socioeconómico como tú dices lo maltratas y lo haces sentir como si fuera
menos… Yo no puedo, lo siento pero no puedo… sabes, voy a empezar a salir con
otra persona, me dio señales de que siente algo más que una simple amistad por mí
y pienso que podría ser un buen padre para mi hijo… el hijo que tú ahora no
quieres reconocer, puedes hacer con tu vida lo que te plazca, la verdad, solo
necesito enviarte este mensaje para seguir con mi vida, había un tiempo en que
te amaba, luego me entere que te habías muerto y te llore, llore al hombre que
amaba, guarde luto y finalmente volviste a aparecer como si nada hubiera
pasado, como si mis lágrimas y todo el dolor que pase por tu causa no sirviera
de nada, yo ya no doy más, nosotros no damos para más, sigue con tu vida
Cristóbal que yo ya estoy siguiendo con la mía.
Carta
XXIX
Chiquita,
realmente lamento que tuvieras que sufrir por ti, me habría gustado evitarte el
dolor y las lágrimas, realmente no me gusta cuando lloras por mi causa y por
ahora, está bien, te dejare ir, ve y diviértete con aquel tipo que ahora te
corteja, espero que te dure, pero eso sí, recuerda que un día voy a ir por ti,
te voy a buscar y te voy a encontrar, reclamare lo que es mío y sé que no te
negaras a regresar conmigo, te lo juro, sé que esto no es un hasta siempre,
solo es un adiós, así que espera, porque en cualquier momento iré por ti,
lamento haber permitido que nos enamoráramos tanto, pero la verdad es que
siento que no puedo vivir sin ti, te amo.
0 escribieron:
Publicar un comentario
Deja tu opinion