Después
de tomar mi sopa se acercó una enfermera a mí, me dio unas indicaciones con
respecto a un remedio que estaba en mi suero y en qué cantidad debe bajar,
veinte minutos después vino y me retiro la vía diciendo que debía dar de lactar
a mi bebe, me revisaron los senos para ver si salía calostro por suerte salía
mucha.
Me
indicaron como acomodar al bebe en mis brazos para darle de lactar y cuánto
tiempo debía darle de cada lado, quince minutos por lado…
Mi
vecina me dijo que tenía que retirarse y que regresaba al día siguiente,
también menciono que su hija venia en camina y que no estaría sola, se despidió
de mí y se fue.
La
primera vez sentí dolor, él bebe no está acostumbrado a mamar de pecho así que
tuve que apretar mi pecho para que pruebe un poco y literalmente obligarlo a
succionar, cabe mencionar que no me aguante la curiosidad y caí en la
tentación… probé mi propia leche y bueno es dulce.
Después
el celular empezó a sonar sin parar, curiosamente varios conocidos se enteraron
que había di a luz y llamaban para felicitarme, agradecí las llamadas, las
conteste todas, perdí la cuenta de cuantas llamadas recibí pero no fueron
mucha… solo hicieron sudar mi oreja.
La
última llamada que recibí fue de mi cuñada quien no se enteró del asunto hasta
que le envié un mensaje.
-
Aló
-
Hola
Gianina ¿Cómo estás?
-
Bien
– dije – ya mejor.
-
¿En
qué habitación estas? ¿Estás en el Hospital Regional?
-
Si
estoy en el hospital regional y estoy en la primera camilla de la sala de
puerperio.
-
¿¡Diste
parto natural!?
-
Sí.
-
Vaya
Gianina, me ganaste, ya casi estoy llegando.
-
Está
bien.
Cortó
la llamada y diez minutos después estaba llegando, yo me había recostado y
abrace al pequeño que dormía a mi lado.
-
Gianina
– escuche de pronto.
Desperté
asustada, me di la vuelta y la vi.
-
Hola
– dije – que tal.
-
¿Bien,
como estas tú? Mira te traje un regalo para él bebe.
-
Gracias.
A
simple vista pude notar que era un paquete de pañales huggies recién nacido.
-
Y
como fue.
-
Tranquilo,
mucho dolor ante dé y tranquilidad después.
-
Me
ganaste.
-
No
se tu pero yo no soy maricona.
Se
ríe de vergüenza y agrega.
-
Y
como se llamara.
-
Joe
Augusto
-
Es
un bonito nombre.